andando es demasiado lento, y en coche o bus...... se ven las cosas pero no se sienten.....
Sólo le encuentro ventajas a la bicicleta...
En ciudad, porque me gusta aparcar a la puerta de donde voy, sin atascos, sin tener que buscar aparcamiento, sin pagar por él, porque hago ejercicio sin necesidad de ir al gimnasio, porque es agradable ir sintiendo la ciudad mientras la recorres, porque te encuentras amigos y puedes ir hablando con ellos por el camino.... ¿hacen falta más motivos?... pues los hay.
En paseos o rutas de 1 día, porque es una forma única de disfrutar de la naturaleza, con la ventaja de poder recorrer zonas relativamente amplias, que andando serían inabarcables e incluso aburridas (con el coche, ni comparo). Desde hace años que la bici me suele acompañar a muchos viajes y a casi todas mis vacaciones.
Viajar con la bicicleta y alforjas,
Yo compré mis primeras alforjas allá por 1997 o 98, ¡y las estrené en 2.008! Los miedos que tenía, totalmente infundados, como los que tenía a la acampada libre o a dormir al raso.... ¡¡cómo puede ser que me estuviese perdiendo esos placeres!! desde entonces casi no viajo de otro modo:
El placer de saber que te estás moviendo por tus propios medios, las cuestas que se sufren, pero que son un reto con el premio final.... Sin la cuesta previa no se disfrutarían tanto las bajadas a toda velocidad, sin mover un músculo, sin gastar combustible.... Y de nuevo el asunto de la velocidad óptima de viaje, andando es imposible hacer recorridos largos, y en bus sólo puedes ir de punto a punto. La bicicleta es casi la única forma de poder "recorrer" el camino, de sentir y vivir la ruta, el país, con todos los sentidos. Pudiendo parar a cada rato, en pueblos que de otro modo jamás visitarías, y es una forma de viaje, que por humilde y esforzada, suele provocar simpatía entre los lugareños.
