miércoles, 24 de octubre de 2012

CALIFORNIA: San Francisco


3ª Fase del Viaje.... esta vez por CALIFORNIA:

Alta California (EE.UU.): San Francisco, Santa Cruz, Monterey, Santa Bárbara, Los Ángeles, San Diego.
Baja California (MÉXICO):  Tijuana, Playas del Rosarito, Ensenada, Mexicali.

La idea inicial era partir desde Tijuana (México), de donde son unos amigos mejicanos que conocí el año pasado en Uruguay, y continuar hacia el Sur, por eso del idioma.... pero resulta que Baja California (México) es puro desierto, no vive nadie, y su única carretera es muy peligrosa....

Así que iré a Tijuana pero desde el Norte, desde Alta California (EE.UU.), quizás la zona más rica y próspera del planeta.

Para hacerse una idea de lo rica que es esta zona, explicar que cuando aún pertenecía a México (1848) tenía 7.000 almas cristianas, y ahora viven por acá unos 40 millones de personas (eso sí, de todas las étnicas y credos imaginables).

Mi llegada a EE.UU. desde luego no fue lo más amable que me ha pasado en la vida....

3 interrogatorios, 4 revisiones completas del equipaje de mano y del facturado.... al principio fastidia..... pero llega un punto donde ya te da igual (me habían quitado los bocadillos, la fruta, la caja de la bici estaba  destrozada de tanto abrir y cerrar.....) Así que yo mismo les insistía en que mejor abriesen la caja y volviesen a sacar todo..... Casi era cómico porque me abrían y volvían a embalar el equipaje diferentes organismos situados a no más de 20 metros.

Con Ray, camino de Sausalito
El remate fue que mi bici estuvo perdida un par de horas en el aeropuerto de San Francisco. Apareció a eso de las 11pm, yo era la única persona que quedaba en la terminal del aeropuerto, y estaba tan cansado... que decidí pasar allí la noche, casi en ayunas, por el asunto de los bocadillos requisados (creo que todavía hoy, 5 días después, sigo arrastrando hambre de entonces).

Pero A LA MAÑANA SIGUIENTE se olvidaron todos los males y penurias.... y la vida volvió a sonreír y ser alegre y de colores:

Con Nakeyshia, Juan y Aids Lifecycle
Y todo a pesar de encontrarme en San Francisco unas cuestas tan fuertes que ni empujando la bici creí que fuese capaz de superar.... pero lo hice, y es que en San Francisco las colinas no se atraviesan, sino que se rodean.... yo lo aprendí bien a mitad de cuesta, cuando ya no tenía remedio.

Llegué a la casa de Ray y Julia, y nada maás llegar partimos a una excursión con la bici a Sausalito. Un placer compartir 2 días con Julia y Ray, me trataron fabulosamente, me dieron consejos muy interesantes y me regalaron un libro de cicloturismo por la Costa Oeste que seguro me va a ser de mucha utilidad. 

Con Cyndi, conociendo San Francisco.
La invitación de Nakeyshia para el sábado fue preciosa, pero los 110 km que me metió para el cuerpo me han dejado destrozado para varios días..... y K.O. para la noche del sábado, que no pude compartir con mis nuevos anfitriones: Nathan y Jeni. Nathan es una persona muy entregada al fomento del uso de la bicicleta, y en su garaje arregla y enseña a la gente gratuitamente, muy buena persona.

Nathan y Jeni
El lunes 22 Oct he comenzado mi viaje hacia el Sur.... 

con más frío del que esperaba.....
pero dicen que más a sur el clima mejora mucho... ¡¡ojalá, es lo que necesita mi metabilismo tropical!!

El día se ha hecho pero que bien duro: viento, el frío, amenaza de lluvia, el primer día de pedaleo con carga, constantes subidas y bajadas, las secuelas de los 110 km del sábado.... en fin, que sólo la motivación de llegar a la casa de Bárbara.

Lo mejor, por huir del viento de la costa, he acabado pedaleando por un carril bici, a lo largo de la famosa Falla de San Andrés, por un bonito parque natural.
Pedaleando hacia el Sur: Falla de San Andrés

En la casa de Bárbara he pasado dos estupendos días, ella está jubilada, pero tiene una vitalidad inagotable y una agenda repleta de eventos, que en parte compartí, con visita a la Universidad de Stanford, charla medioambiental, cena con amistades.... y sobretodo Barbara es una estupenda cocinera, me ha hecho recuperar del hambre que pasé en el aeropuerto... si me quedo aquí más días, engordo!!

Es interesante conocer cómo funcionan  aquí las cosas y las relaciones sociales, de forma muy distinta a como son en España o los países latinos. Y mi inglés sacado del baúl de los recuerdos, tampoco está funcionando mal... milagrosamente suelen entender mi pronunciación y yo les entiendo casi todo, así que sin queja.... y avanzando al Sur.
Con Bárbara, en Portola Valley, un pueblo casi escondido en el bosque








1 comentario:

  1. Madre mía. Estos yankis siguen con la misma paranoia de siempre. Imaginaba que ibas a tener problemas con el equipaje porque cualquier paquete extraño les pone de los nervios. A mi me quitaron dos barras de chorizo ibérico cuando fui a Chicago y todavía me acuerdo de la cara de placer que puso el guardia cuando me dijo que no podía pasar con esas cosas.

    A ver si mejora el tiempo, que parece que hace fresquito por allí. Un abrazo

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